Cuando se descubre temprano, el cáncer testicular es curable, ya que su tratamiento casi siempre es efectivo. El cáncer de testículo se puede curar incluso en los casos en que la enfermedad solo se haya diagnosticado en una etapa más avanzada, aunque en este caso se necesita más tiempo de tratamiento. Comprenda qué es el cáncer testicular y cómo se trata.
En la fase inicial, el oncólogo debe elegir usar solo quimioterapia, que consiste en el uso de medicamentos que tratarán de prevenir la replicación de las células enfermas, evitando el crecimiento del tumor. Si esta forma de tratamiento no es bien aceptada y el tumor continúa creciendo, se recomienda que el paciente también se someta a radioterapia.
Si con estas terapias el tumor continúa creciendo, las posibilidades de que genere metástasis serán mayores y el médico puede optar por extirpar el testículo afectado mediante cirugía. Después de este paso, el médico puede colocar una prótesis, una especie de bola dentro del testículo para que la estética no se vea afectada.
Expectativa de vida
La esperanza de vida depende de la respuesta del paciente a la terapia, porque en los casos en que el paciente no responde a la terapia adecuadamente, puede extenderse a otras partes del cuerpo y la consiguiente proliferación, caracterizando la metástasis.
El cáncer de testículo puede tratarse fácilmente, incluso en casos de metástasis, e incluso puede alcanzar una cura cuando se diagnostica temprano. La supervivencia del paciente, que corresponde a la esperanza de vida después del diagnóstico, varía entre 5 y 10 años. Sin embargo, los hombres que son diagnosticados con este tipo de cáncer generalmente sobreviven más tiempo debido a los avances en las técnicas de tratamiento.
La expectativa de vida debe ser informada por el médico y varía de un paciente a otro según el grado de desarrollo de la enfermedad, la implicación de otros órganos, la edad, la salud general y la respuesta de la enfermedad al tratamiento.
