- Síntomas principales
- Como se hace el tratamiento
- ¿Cómo se realiza la fisioterapia?
- ¿Qué puede causar parálisis?
La parálisis facial periférica, también conocida como parálisis facial de Bell, es un trastorno neurológico que ocurre cuando el nervio facial se ve afectado por alguna razón, lo que lleva a síntomas como dificultad para mover la cara, falta de expresión en una parte de la cara o solo la sensación de hormigueo.
La mayoría de las veces, la parálisis facial es temporal, debido a una inflamación alrededor del nervio facial que causa compresión del nervio y desencadena los síntomas, siendo más común después de una infección por el virus del herpes simple y el herpes zoster, pero también por el citomegalovirus. (CMV), Epstein-Barr (EBV), rubéola, paperas o por enfermedades inmunes, como la enfermedad de Lyme.
Por lo tanto, si observa parálisis, es importante ver a un médico general para identificar si hay algún otro problema que necesite tratamiento. Además, si experimenta otros síntomas como desorientación, debilidad en otras partes del cuerpo, fiebre o desmayos, es importante que acuda al médico de inmediato.
Síntomas principales
Los síntomas más frecuentes de la parálisis facial de Bell son:
- Boca torcida, que es más evidente cuando se trata de sonreír; Boca seca; Falta de expresión en un lado de la cara; Incapacidad para cerrar completamente un ojo, levantar una ceja o fruncir el ceño; Dolor u hormigueo en la cabeza o la cabeza mandíbula; aumento de la sensibilidad del sonido en un oído.
El diagnóstico de parálisis facial se realiza a través de la observación del médico y, en la mayoría de los casos, no es necesario realizar pruebas adicionales. Sin embargo, para asegurarse de que se trata solo de una parálisis facial periférica, uno puede usar resonancia magnética, electromiografía y análisis de sangre, por ejemplo, para encontrar el diagnóstico exacto.
Como se hace el tratamiento
En general, el tratamiento para la parálisis facial consiste en la administración de medicamentos corticosteroides, como la prednisona, a los que se puede agregar un antiviral como el valaciclovir, sin embargo, el médico solo lo recomienda en algunos casos.
Además, también es necesario hacer fisioterapia y aplicar gotas lubricantes para los ojos para prevenir la sequedad ocular. El uso de gotas oculares o lágrimas artificiales es esencial para mantener el ojo afectado adecuadamente hidratado y para reducir el riesgo de daño corneal. Para dormir, debe aplicar una pomada recetada por el médico y usar protección para los ojos, como una venda en los ojos, por ejemplo.
Las personas que experimentan dolor asociado con la parálisis también pueden usar analgésicos o antiinflamatorios, como el paracetamol o el ibuprofeno, por ejemplo.
¿Cómo se realiza la fisioterapia?
La fisioterapia utiliza ejercicios faciales para fortalecer los músculos y mejorar los movimientos y expresiones faciales. Sin embargo, es importante que estos ejercicios se realicen varias veces al día, todos los días, para mejorar el tratamiento. Por lo tanto, además de las sesiones con el fisioterapeuta, es esencial hacer los ejercicios en casa y, a veces, también puede hacer sesiones con un logopeda.
Vea algunos ejemplos de ejercicios que se pueden hacer para la parálisis de Bell.
¿Qué puede causar parálisis?
La parálisis facial ocurre debido al deterioro de los nervios en la cara que paraliza los músculos faciales. Algunas de las posibles causas de parálisis son:
- Cambio repentino de temperatura; Estrés; Trauma; Infección viral con herpes simple, herpes zoster, citomegalovirus u otros; En raras ocasiones, puede ser consecuencia de otras enfermedades.
Por lo tanto, la parálisis puede ocurrir en el camino del nervio facial dentro del cerebro o fuera de él. Cuando ocurre dentro del cerebro es consecuencia de un derrame cerebral y viene con otros síntomas y secuelas. Cuando ocurre fuera del cerebro, en el camino de la cara, es más fácil de tratar y, en este caso, se llama facial periférica o parálisis de Bell.
