- ¿Qué articulaciones son las más afectadas?
- Síntomas principales
- Cómo se hace el diagnóstico
- Causas de la artrosis
- Como es el tratamiento
- Como prevenir la osteoartritis
La artrosis es una enfermedad en la que se produce degeneración y aflojamiento de la articulación, lo que provoca síntomas como hinchazón, dolor y rigidez en las articulaciones y dificultad para hacer movimientos.
Esta es una enfermedad degenerativa crónica, que no tiene cura, pero puede tratarse mediante el uso de medicamentos que alivian el dolor y la inflamación y mediante ejercicios diarios de estimulación y fisioterapia que terminan controlando y retrasando el desarrollo de la enfermedad.
¿Qué articulaciones son las más afectadas?
La artrosis es una enfermedad que puede surgir en cualquier articulación, sin embargo, es más común en ciertas articulaciones que incluyen:
- Las articulaciones que soportan el peso del cuerpo, como las de la cadera y la rodilla, causan dolor y dificultad para caminar. Descubra todo sobre estos tipos de artrosis en artrosis de rodilla y artrosis de cadera. Articulaciones de la columna, en el cuello o al final de la columna, que causan dolor en el cuello y la espalda y dificultad para moverse. Obtenga más información sobre la osteoartritis en la columna haciendo clic aquí. Articulaciones de las manos, en las articulaciones de los dedos y especialmente en el pulgar, que causan síntomas de dolor, hinchazón, deformaciones en los dedos, dificultad para levantar objetos pequeños como bolígrafos o lápices y falta de fuerza; Articulación del hombro, que causa síntomas de dolor en el hombro que se irradia al cuello y dificultad para mover el brazo. Conozca los síntomas de la artrosis del hombro haciendo clic aquí.
Síntomas principales
Los principales síntomas de la artrosis incluyen:
- Dolor en la articulación afectada; Dificultad para realizar movimientos; Hinchazón y rigidez en la articulación;
Además, a medida que la enfermedad progresa, comienzan a aparecer algunas deformaciones en la región de las articulaciones afectadas.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de artrosis realizado por el ortopedista o reumatólogo a través del análisis y observación de síntomas de dolor, hinchazón, rigidez y dificultad para mover la articulación.
A partir de estos síntomas, el médico puede sospechar de osteoartritis y luego solicitar una radiografía o una resonancia magnética para confirmar el diagnóstico.
Causas de la artrosis
La artrosis puede tener varias causas, que pueden incluir:
- Desgaste natural de las articulaciones causado por el envejecimiento natural; trabajos exigentes que sobrecargan algunas articulaciones como sucede con las criadas, peluqueros o pintores, por ejemplo; Deportes que sobrecargan repetidamente ciertas articulaciones o que requieren movimientos de torsión constantes como el fútbol, el béisbol o el fútbol, por ejemplo; Debilidad en la parte superior de las piernas; Actividades en las que es necesario agacharse o arrodillarse repetidamente mientras levanta objetos pesados; Exceso de peso, lo que provoca un mayor desgaste, especialmente en las articulaciones de las piernas o la columna vertebral; Lesiones como fracturas, esguinces o golpes que afectan la articulación.
Además, también es importante tener en cuenta los antecedentes familiares de osteoartritis, ya que esta enfermedad tiene un cierto origen genético, sin olvidar que este problema, aunque es común en todas las edades, aparece más fácilmente después de los 50 años debido a Envejecimiento natural del cuerpo.
Como es el tratamiento
La artrosis es un problema que no se puede curar, y su tratamiento se basa en el uso de remedios antiinflamatorios y analgésicos para reducir el dolor y la inflamación de las articulaciones y en fisioterapia, ejercicios o hidroterapia.
La fisioterapia y los ejercicios deben realizarse diariamente, de modo que mantengan el movimiento articular, fortalezcan y mejoren su movimiento. Además, durante las sesiones de fisioterapia, se pueden utilizar dispositivos de electroestimulación y ultrasonido que estimulan la articulación, disminuyen la inflamación, facilitan la curación y controlan el dolor.
En los casos en que la artrosis está relacionada con el sobrepeso, los pacientes también deben estar acompañados por un nutricionista para comenzar una dieta para bajar de peso. Cuando hay una mala postura, el fisioterapeuta debe realizar una reeducación postural global para reducir las compensaciones y el dolor generado por la mala postura.
En general, estos tratamientos son suficientes para controlar la artrosis, sin embargo, en los casos más severos donde no hay mejoría y cuando el dolor persiste, puede estar indicada la colocación de una prótesis articular.
Como prevenir la osteoartritis
Una de las principales formas de tratamiento es la prevención de la osteoartritis, y para eso hay algunas precauciones que deben seguirse que incluyen:
- Evite el exceso de peso; mantenga una buena postura corporal; evite levantar pesas, especialmente en el área del hombro; Evite realizar ejercicios repetitivos; evite realizar trabajos forzados.
La artrosis es una enfermedad degenerativa crónica y, por lo tanto, no hay un buen pronóstico de la enfermedad, ya que sirve tratamientos para aliviar el dolor y la inflamación, retrasar el progreso de la enfermedad, mejorar el movimiento y la calidad de vida.
