No se recomienda el uso de suplementos de vitamina C y E en embarazos de alto riesgo, cuando la mujer embarazada tiene problemas como preeclampsia, presión arterial alta, problemas renales, diabetes y dificultades de coagulación.
Esto se debe a que el uso excesivo de estos suplementos está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar preeclampsia con síntomas más graves, parto prematuro y bajo peso al nacer, además de causar molestias gástricas, dolor y aumento de las náuseas en las mujeres. Vea qué vitaminas se recomiendan para mujeres embarazadas.
Daño de la vitamina C
El uso excesivo de suplementos de vitamina C puede causar problemas en el embarazo, como un mayor riesgo de parto prematuro y el nacimiento de bebés con escorbuto, una enfermedad resultante de la deficiencia de vitamina C en el cuerpo.
Daño de la vitamina E
El exceso de vitamina E durante el embarazo favorece la aparición de cambios en el sistema inmunitario de la mujer embarazada, haciendo que su cuerpo ataque al bebé como un cuerpo extraño, en lugar de protegerlo.
También puede causar cambios en la placenta, haciendo que el bebé reciba menos nutrientes y nazca con un peso inferior al ideal. Además, se cree que estos bebés tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades en el futuro, como asma y eccema.
Cómo usar suplementos de manera segura
Los suplementos durante el embarazo solo deben usarse de acuerdo con el consejo del médico o nutricionista, es importante seguir las dosis recomendadas y la frecuencia de uso del suplemento.
Los suplementos específicos para el embarazo tienen cantidades adecuadas de nutrientes, y no es necesario usar más suplementos para obtener mayores beneficios, ya que el exceso de vitaminas y minerales también puede ser peligroso para el cuerpo.
Además, comer una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, ya aporta los nutrientes necesarios para un embarazo saludable, y las vitaminas C y E se pueden encontrar fácilmente en alimentos como la naranja, mandarina, piña, kiwi, semillas de girasol y maní..
Vea dónde encontrar vitamina C y vitamina E en los alimentos para consumirlos naturalmente y sin riesgos para la salud.
