El botulismo infantil es una enfermedad rara pero grave, causada por la bacteria Clostridium botulinum que se puede encontrar en el suelo y que puede contaminar el agua y los alimentos, por ejemplo. Además, los alimentos mal conservados son una gran fuente de proliferación de esta bacteria. Por lo tanto, la bacteria puede ingresar al cuerpo del bebé a través del consumo de alimentos contaminados y comenzar a producir una toxina que resulta en la aparición de síntomas.
La presencia de la toxina en el cuerpo del bebé puede provocar un deterioro grave del sistema nervioso, y la infección puede confundirse con un accidente cerebrovascular, por ejemplo. La fuente más común de infección en bebés menores de 1 año es el consumo de miel, porque la miel es un excelente medio para propagar las esporas producidas por esta bacteria.
Síntomas de botulismo en el bebé.
Los síntomas iniciales del botulismo en el bebé son similares a los de la gripe, sin embargo, son seguidos por una parálisis de los nervios y músculos de la cara y la cabeza, que luego evoluciona hacia los brazos, las piernas y los músculos respiratorios. Por lo tanto, el bebé puede presentar:
- Dificultad para tragar; Succión débil; Apatía; Pérdida de expresiones faciales; Somnolencia; Letargo; Irritabilidad; Pequeñas pupilas reactivas; Estreñimiento.
El botulismo del bebé se confunde fácilmente con la parálisis de un derrame cerebral, sin embargo, la falta de diagnóstico y tratamiento adecuado del botulismo puede agravar la afección y provocar la muerte debido a la alta concentración de toxina botulínica que circula en la sangre del bebé.
El diagnóstico es más fácil cuando hay información sobre los antecedentes alimentarios recientes del niño, pero solo se puede confirmar mediante análisis de sangre o cultivo de heces, en el que se debe verificar la presencia de la bacteria Clostridium botulinum .
Aquí se explica cómo reconocer los síntomas del botulismo.
Como se hace el tratamiento
El tratamiento del botulismo en el bebé se realiza con lavado estomacal e intestinal para eliminar los restos de comida contaminada. Se puede utilizar la inmunoglobulina intravenosa contra el botulismo (IGB-IV), pero produce efectos secundarios que merecen atención. En algunos casos, es necesario que el bebé respire con la ayuda de dispositivos durante unos días y, en la mayoría de los casos, se recupera por completo, sin mayores consecuencias.
Además de la miel, vea otros alimentos que el bebé no puede comer hasta los 3 años de edad.