El tratamiento para la enfermedad por arañazo de gato se realiza con el uso de analgésicos, antipiréticos y antibióticos, que reducen el dolor, la inflamación y eliminan por completo los microorganismos involucrados en esta infección.
Los antibióticos más utilizados son Rifanpim o Ciprofloxacina, generalmente administrados durante 3 semanas, pero el médico puede recetar otros que sean más apropiados, según la edad de la persona y las características de las lesiones, además del curso de la enfermedad.
Los ganglios linfáticos inflamados y fluidos se pueden drenar con agujas para aliviar el dolor, ya que es común que estos lugares estén muy hinchados y dolorosos, y permanezcan así durante muchos días. Cuando el área está muy hinchada y dolorosa, el médico puede decidir realizar una cirugía para extirpar el bulto, mejorando la calidad de vida del individuo.
Por lo general, el tratamiento lleva mucho tiempo y la fiebre puede continuar aumentando a diario, incluso con el uso de antibióticos, por lo que en caso de duda, siempre debe consultar al médico para saber cómo actuar. El médico puede cambiar el antibiótico o incluso agregar un poco más de medicamento, dependiendo de cómo responda el cuerpo de la persona al tratamiento. La mayoría de los pacientes se recuperan completamente de la enfermedad entre 2 y 5 meses.